Protagonizada
por Simon Pegg y Lake Bell, la película “Man Up” o “Atrévete” (en
Latinoamérica) es una coproducción entre Gran Bretaña y Francia, dirigida por
Ben Palmer y escrita por Tess Morris.
La comedia
romántica nos cuenta la historia de Nancy (Lake Bell), una soltera de 34 años
que se ha rendido en el amor después de vivir malas experiencias y que por
error conoce a Jack (Simon Pegg), al éste confundirla con su cita a ciegas,
pero en lugar de decirle la verdad, decide usurpar el lugar de la mujer con la
cual esperaba encontrarse quien pudiera ser su alma gemela.
La premiere de este largometraje se llevó a
cabo en Nueva York, dentro del Tribeca Film Festival el 19 de abril del 2015,
para después ser estrenada el 29 de mayo en Reino Unido y el 13 de noviembre en
Estados Unidos.
Simon Pegg es también productor ejecutivo de la cinta, cuyo elenco lo completan Ken Stott,
Harriet Walter, Sharon Horgan, Paul Thornley, Olivia Williams, Rory Kinnear,
Stephen Campbell Moore y Ophelia Lovibond.
Tráiler:
⧫ Mi opinión ⧫
Di con
esta película cuando buscaba una comedia romántica, de esas que te dejan
suspirando tanto por la historia como por los protagonistas, por lo que al
encontrarme con “Man Up” y ver a Simon Pegg casi la descartó de inmediato, no
porque no me guste Simon, sino más bien por el hecho de que lo ubico más bien
en comedias, pero algo me llamaba la atención de la pareja estelar por lo cual la seleccioné para leer la sinopsis y la premisa me encantó: “Una mujer se
detiene bajo el reloj de la estación y un desconocido la confunde con su cita a
ciegas. Es justo la oportunidad que ella estaba esperando” (Netflix).
El
inicio te centra frente a un edificio con fachada clásica y, junto a la canción
“Upside Down” de Paloma Faith, la cámara te lleva dentro del mismo al ir siguiendo
primero a dos mujeres que acaban de llegar, para luego centrar tu atención en
un botones, dándote cuenta así que se trata de un hotel. Después la toma se
desliza hacia un hombre y una mujer que visten como si estuvieran en Hawái, quienes
te conducen a una fiesta, para así continuar tu camino como si fueras un
invitado más, hasta encontrarte con una pareja de enamorados, por medio de los
cuales accedes al área de las habitaciones, llegando finalmente al cuarto de
una mujer que se está preparando para salir y ésta es Nancy, nuestro personaje
principal.
Me
encanta como la cámara es desde el inicio tu mejor compañera y cómplice al
mismo tiempo, manejándose en ocasiones como si se tratara de un one-shot,
para luego ser tomas fijas que cambian constantemente, permitiéndote enterarte
de más cosas de la trama. En algunas partes de la película he de destacar el movimiento que le imprimen a la cámara, el cual va muy de acuerdo con la carga
emocional del momento, y como espectador es maravilloso, pues te identificas
más con los personajes y el instante que viven. También es sobresaliente que en
algunos fragmentos del film la cámara se mueve muy sutilmente, conduciéndote de un
extremo a otro de lo que aparece en pantalla, sin casi notarlo. De igual manera
se manejan diferentes planos a lo largo de todo la cinta, pasando de uno
a otro de manera tan magistral y contrapuestos al mismo tiempo, llevándote de
una carrera, a una reunión o a una toma aérea, todo en una misma secuencia,
haciéndote estar atento en todo momento.
El
ritmo es tan variado, cambiando constantemente, pues de pronto puedes ir a mil
por hora en una persecución o carrera para luego llegar a un punto de calma
donde puedes relajarte un poco, aunque no del todo pues en este punto ya te han
acostumbrado a que cualquier cosa puede pasar en cualquier momento. Es una montaña rusa de principio a fin, con picos de locura y comedia disparatada
para luego descender a segmentos de serenidad que dan cabida a momentos
emotivos. El caos pareciera siempre estar presente, haciendo a la película más
atractiva en lugar de caótica, pues hay orden dentro del desorden.
Por
la descripción del filme podría considerarse a la narrativa como simple, pero
no lo es, pues aunque se manejan estereotipos y clichés, y llegan a pasar cosas
tan absurdas que parecieran imposibles de creer, al mismo tiempo el contenido
es tan rico con teorías bastante bien planteadas, frases conocidas, peleas con
mucho sentido, discursos tan bien estructurados que tocan cada fibra del
espectador y hasta momentos bochornosos por los que pasan nuestros personajes,
los cuales hacen te preguntes qué tanto la
ficción imita a la realidad o la realidad a la ficción. Todo esto con un toque
de ese tan particular sentido del humor británico cinematográfico.
La música
está presente durante toda la película, que bien podría considerársele un
musical, pues la banda sonora es parte activa de la cinta, ya que en ocasiones
la trama se desarrolla sin diálogo y muy poco sonido ambiental, pero te sigue
contando la historia, cómo se desarrolla ésta o bien cómo evoluciona la
relación entre nuestros protagonista, todo esto por medio de una canción
perfectamente seleccionada. Incluso en cierto punto del relato el tema musical
se vuelve parte del diálogo y de la interacción entre Nancy y Jack, de una
manera tan original que deseas todas las discusiones fueran de la misma manera.
Ambos
protagonistas están sensacionales, pues igual te muestran su faceta cómica e
irreverente, para luego sumergirte en un poco de drama, dejándote ver su lado
más vulnerable, convirtiéndose su actuación en una delicia para el espectador;
sin menospreciar la del reparto secundario que igual brillan en cada
participación.
Existen
varios elementos que juegan un papel importante en la dinámica del relato y en
la relación de nuestros personajes principales (los diría pero sería spoiler), destacándose
uno de entre todos, el cual, aunque no lo notas en un principio, se convierte
en pieza fundamental para que Nancy y Jack sigan conectados o bien presentes uno
en los pensamientos del otro.
Así
que, por mantenerme interesada de principio a fin, divertirme con lo absurdo de
las situaciones pero al mismo tiempo hacerme pensar en lo posibles que pueden
ser, por hacer que el caos tenga orden y ofrecernos actuaciones maravillosas,
pero sobre todo por hacerme ver a Simon Pegg (Jack) como un posible interés
romántico, “Man Up” es una excelente
película para agregar a tu lista de favoritas.
Tráiler:



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